Otra de albóndigas pero vestidas de tarta.
Además con una salsa distinta a la de siempre y que le aporta un saborcillo impresionante además de jugosidad.
La pena es que las patatas no aguantaron la "sesión de fotos" y se fueron abriendo un poquito pero os aseguro que, pese a no estar perfecta estéticamente, es una idea para no dejar pasar ya que partiendo de la base de siempre en la mesa, patatas más albóndigas, conseguimos un plato festivo pero fácil a más no poder.
Incluso una idea genial para dejar preparada con antelación, dejando pendiente el ponerle el queso rallado y darle un golpe de horno, a la vez que gratinamos, se calienta y está listo para tomar en poco tiempo.
¡Vamos, que todo son ventajas!
* Necesitamos:
Para las albóndigas:
- 500 gr de carne picada de cerdo y ternera
- 1/2 pimiento rojo y 1/2 verde
- 1 cebolla, 1 ajo y perejil
- 1 huevo
- vino blanco
- pan rallado
- sal y pimienta
- harina para frituras
Para la salsa:
- 2 cebollas, 1 ajo y perejil
- 1/2 pimiento rojo y 1/2 verde
- 1/2 vaso de vino blanco
- aceite de oliva
- 3 patatas para la base de nuestra tarta
- queso rallado para gratinar
Fuente: Belenciaga
* Preparación:
De las albóndigas:
- Picamos el pimiento rojo y verde, la cebolla y el ajo con el perejil, que quede muy fino picado, rehogamos en unas cucharadas de aceite.
- Añadimos la carne picada junto al huevo, el vino y una cucharada de pan rallado.
Salpimentamos y amasamos hasta que esté bien integrado todo.
- Formamos las albóndigas, las pasamos por la harina y freímos, reservamos.
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De la base de patatas:
- Pelamos las patatas y las cortamos en rodajas muy finas.
Las freímos a fuego lento para que queden blandas.
- Las colocamos en un aro de emplatar sobre la fuente donde vamos a hornear.
Forramos el fondo y los lados con las patatas procurando que no queden huecos.
- Rellenamos con las albóndigas.
De la salsa:
- En el mismo aceite que hemos frito las albóndigas, freímos las cebolla picada, el pimiento muy picado, el ajo y el perejil, salpimentamos y añadimos el vino, dejamos hervir hasta que quede espesa la salsa.
- Vertemos la salsa sobre las albóndigas, cubrimos con queso rallado y gratinamos unos minutos hasta que el queso esté fundido y dorado.
- Retiramos el aro en caliente y servimos.
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